PLANTEAMIENTOS SOBRE SUEÑOS
Sigmund Freud
Sigmund Freud fue el padre del psicoanálisis. Según Freud los sueños sirven para comunicar todo aquello que la mente consciente no puede aceptar. Deseos inconscientes que no se quieren reconocer y que por este motivo aparecen en los sueños representados de forma simbólica. Es decir, los sueños son la vía de expresión de deseos reprimidos que tiene la persona.
Para Sigmund Freud la infancia es un periodo clave de nuestra vida psíquica, hasta el punto que de adultos la mayoría de los sueños se relacionan con los deseos, traumas y recuerdos de la infancia.
André bretón
Según Bretón: ''el sueño tiene una realidad objetiva y ejerce a su vez una gran influencia en la realidad consciente objetiva''. En sus poemas podemos apreciar la poca coherencia de sus textos, parece que no hay una interpretación lógica de sus poemas, que también se puede deducir que son sus sueños.
Max Ernst
Max Ernst subraya tres cuestiones: ''primera, que el surrealismo no es tanto una escuela literaria, ni una corriente artística, ni un movimiento político, cuanto una filosofía de vida, en la que el arte funciona como instrumento de conocimiento; segunda, que no existe un estilo surrealista único o común, sino que cada artista expresa en su propio lenguaje un universo interior “exquisitamente individual”; y tercera, que la imagen surrealista, punto de partida de su operación creativa, no se fundamenta en la semejanza, sino en el contraste de realidades muy distintas que se relacionan en un lugar absurdo, donde esas realidades se han de sentir extrañas''
René Magritte
Ya durante su estancia en París, Magritte tuvo mucho interés en fundamentar teóricamente la relación entre la palabra, el cuadro y el objeto, y establecerla como tema del arte plástico. En su obra pictórica, este interés quedó reflejado en las numerosas variantes de los cuadros con texto de aquellas fechas. En el plano teórico, Magritte dio a conocer el resultado de sus reflexiones en su primera colaboración en el mismo número que incluía el Segundo manifiesto de André Bretón. En esta ocasión presentó sucesivamente dieciocho proposiciones, cada una de ellas ilustrada con su cuadro correspondiente, sobre la relación existente entre la palabra y la imagen.
Salvador Dalí
MÉTODO PARANOICO-CRÍTICO: El descontrol era una sensación que aterrorizaba a Salvador Dalí y de la que, por lo tanto, había tratado de huir siempre. De hecho, la objetividad de todo fenómeno es el fin principal de la obra y la personalidad daliniana. Lo consiguió, en un principio, mediante la técnica ordenada del cubismo.
Uno de los rasgos que define a este método paranoico-crítico es su carácter activo, contrapuesto a la pasividad y automatismo de la escritura surrealista, que anulaba cualquier intervención consciente. Dalí considera que las situaciones de delirio que fluyen y surgen en la realidad diaria, visualizadas por el paranoico debido a su obsesión, son interpretadas críticamente para poder conocerlas y dominarlas.
Para Sigmund Freud la infancia es un periodo clave de nuestra vida psíquica, hasta el punto que de adultos la mayoría de los sueños se relacionan con los deseos, traumas y recuerdos de la infancia.
Según Bretón: ''el sueño tiene una realidad objetiva y ejerce a su vez una gran influencia en la realidad consciente objetiva''. En sus poemas podemos apreciar la poca coherencia de sus textos, parece que no hay una interpretación lógica de sus poemas, que también se puede deducir que son sus sueños.
Max Ernst
Max Ernst subraya tres cuestiones: ''primera, que el surrealismo no es tanto una escuela literaria, ni una corriente artística, ni un movimiento político, cuanto una filosofía de vida, en la que el arte funciona como instrumento de conocimiento; segunda, que no existe un estilo surrealista único o común, sino que cada artista expresa en su propio lenguaje un universo interior “exquisitamente individual”; y tercera, que la imagen surrealista, punto de partida de su operación creativa, no se fundamenta en la semejanza, sino en el contraste de realidades muy distintas que se relacionan en un lugar absurdo, donde esas realidades se han de sentir extrañas''
René Magritte
Ya durante su estancia en París, Magritte tuvo mucho interés en fundamentar teóricamente la relación entre la palabra, el cuadro y el objeto, y establecerla como tema del arte plástico. En su obra pictórica, este interés quedó reflejado en las numerosas variantes de los cuadros con texto de aquellas fechas. En el plano teórico, Magritte dio a conocer el resultado de sus reflexiones en su primera colaboración en el mismo número que incluía el Segundo manifiesto de André Bretón. En esta ocasión presentó sucesivamente dieciocho proposiciones, cada una de ellas ilustrada con su cuadro correspondiente, sobre la relación existente entre la palabra y la imagen.
Salvador Dalí
MÉTODO PARANOICO-CRÍTICO: El descontrol era una sensación que aterrorizaba a Salvador Dalí y de la que, por lo tanto, había tratado de huir siempre. De hecho, la objetividad de todo fenómeno es el fin principal de la obra y la personalidad daliniana. Lo consiguió, en un principio, mediante la técnica ordenada del cubismo.
Uno de los rasgos que define a este método paranoico-crítico es su carácter activo, contrapuesto a la pasividad y automatismo de la escritura surrealista, que anulaba cualquier intervención consciente. Dalí considera que las situaciones de delirio que fluyen y surgen en la realidad diaria, visualizadas por el paranoico debido a su obsesión, son interpretadas críticamente para poder conocerlas y dominarlas.
Max Ernst subraya tres cuestiones: ''primera, que el surrealismo no es tanto una escuela literaria, ni una corriente artística, ni un movimiento político, cuanto una filosofía de vida, en la que el arte funciona como instrumento de conocimiento; segunda, que no existe un estilo surrealista único o común, sino que cada artista expresa en su propio lenguaje un universo interior “exquisitamente individual”; y tercera, que la imagen surrealista, punto de partida de su operación creativa, no se fundamenta en la semejanza, sino en el contraste de realidades muy distintas que se relacionan en un lugar absurdo, donde esas realidades se han de sentir extrañas''
René Magritte
Ya durante su estancia en París, Magritte tuvo mucho interés en fundamentar teóricamente la relación entre la palabra, el cuadro y el objeto, y establecerla como tema del arte plástico. En su obra pictórica, este interés quedó reflejado en las numerosas variantes de los cuadros con texto de aquellas fechas. En el plano teórico, Magritte dio a conocer el resultado de sus reflexiones en su primera colaboración en el mismo número que incluía el Segundo manifiesto de André Bretón. En esta ocasión presentó sucesivamente dieciocho proposiciones, cada una de ellas ilustrada con su cuadro correspondiente, sobre la relación existente entre la palabra y la imagen.
Salvador Dalí
MÉTODO PARANOICO-CRÍTICO: El descontrol era una sensación que aterrorizaba a Salvador Dalí y de la que, por lo tanto, había tratado de huir siempre. De hecho, la objetividad de todo fenómeno es el fin principal de la obra y la personalidad daliniana. Lo consiguió, en un principio, mediante la técnica ordenada del cubismo.
Uno de los rasgos que define a este método paranoico-crítico es su carácter activo, contrapuesto a la pasividad y automatismo de la escritura surrealista, que anulaba cualquier intervención consciente. Dalí considera que las situaciones de delirio que fluyen y surgen en la realidad diaria, visualizadas por el paranoico debido a su obsesión, son interpretadas críticamente para poder conocerlas y dominarlas.